Hasta hace poco la OMS alertaba sobre la falta de estos implementos, e instaba a la industria y los gobiernos a aumentar su producción en al menos un 40%, para satisfacer la creciente demanda mundial.
Por ello la importancia del proyecto de Copper3D, empresa chileno-estadounidense que desde 2018 se enfoca en desarrollos relacionados con la tecnología de impresión en 3D, pero con materiales anti-microbianos y anti-virales que de acuerdo a sus creadores, podrían ayudar a evitar contagios de coronavirus, infección que en el mundo acumula 263 mil infectados, 10.444 fallecidos y 434 casos confirmados en Chile.
“Es una tecnología que a través de la manipulación de un material con aditivos en base a nanopartículas de cobre (elemento con propiedades anti-microbiales y anti-virales), a su vez le entrega estas características a la impresión en 3D”, señala Daniel Martínez, Director de Innovación de Copper3D.
Martínez cuenta que a propósito de la pandemia decidieron lanzar la campaña “Hack the Pandemic”, una propuesta de código abierto en el que los usuarios pueden tener el implemento en sus casas con una impresora 3D, logrando gran éxito: 50 países y 3 millones de descargas en las primeras 48 horas.
Pero el desafío no sólo es el diseño para la impresión en 3D. A pesar que en los últimos años esta tecnología se ha vuelto más asequible, los materiales y el mismo aparato tienen su costo. En Amazon se pueden encontrar desde 250 mil pesos chilenos, y se pueden crear distintas cosas, si sabemos cómo hacerlo o tenemos los planos respectivos.
Esta mascarilla cuenta con las siguientes características:
- Antimicrobiano y antiviral, al ser fabricado con PLActive, un innovador nanocompuesto desarrollado con un PLA de alta calidad y un aditivo de nanocobre patentado, científicamente validado y altamente efectivo.
- Reciclable: El aumento de uso de máscaras quirúrgicas de un solo uso y respiradores tendrá un efecto perjudicial sobre el medioambiente. Para evitar este efecto perjudicial en el ecosistema, al utilizar el filamento PLActive para su impresión se está consumiendo un material reciclable.
- Patrón plano, para facilitar su fabricación de forma masiva y en prácticamente cualquier impresora 3D FDM.
- Sistema modular de filtración: La mascarilla incorpora un novedoso sistema modular de filtración de partículas finas fabricado con un material que utiliza nanocompuestos de cobre comprobados para desactivar virus. Este sistema de filtración incluye varias capas con diferentes geometrías para proporcionar una filtración efectiva de partículas finas. Además, puede alojar materiales de filtración de terceros, como propileno no tejido, esponjas o textiles.
- Capacidades de termoformación a 55 - 60 ºC, que permite dar la forma correcta de la anatomía de cualquier cara simplemente usando un secador de pelo o agua tibia.
- Control de la filtración y toma de aire. El uso prolongado de respiradores ha demostrado reducir la capacidad pulmonar. Estos respiradores de un solo uso no permiten la regulación de la entrada de aire o el tamaño de partícula. Esta mascarilla incorpora un disco de filtración modular que puede regular eficazmente la entrada de aire y el tamaño de partícula. Este sistema puede personalizarse mediante el uso de propileno de filtración no tejido, ropa, esponjas y diferentes textiles para reducir el nivel de filtración.
La impresión 3D y el ensamblaje de la mascarilla es muy sencillo, pero es importante seguir las siguientes instrucciones para un uso seguro:
- Imprimir las piezas con un 20 % de relleno, sin soporte ni balsas. Cada mascarilla consume unos 40 gramos de filamento, por lo que con una bobina de 750 gramos de PLActive se podrán imprimir unas 17-18 mascarillas.
- Calentar la mascarilla a 55 - 60 ºC con un secador de pelo o agua caliente. La parte circular debe que estar intacta, por este motivo es más gruesa para así evitar deformaciones.
- Al ablandar, juntar las alas de la nariz y las alas de ajuste ubicadas en la mandíbula inferior.
- Calentar nuevamente y colocarlo en la cara para ajustarlo totalmente a cada fisonomía.
- Introducir uno o dos filtros adicionales. Si se usa un filtro, se puede usar una pieza circular (simple o doble) de una máscara convencional de propileno no tejido (A) o agregar una almohadilla desmaquillante de algodón (B), ajustándolos bien a la ventana del sistema de filtración. Se puede regular el filtrado y el flujo de aire con combinaciones de estos elementos.
- Añadir los elásticos para su sujección.
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Jose Roberto Maradiaga (jueves, 25 junio 2020 13:48)
Muchisimas gracias, será de mucha ayuda.